La Unidad Canina de la Dirección de Policía Procesal, adscrita a la Coordinación del Sistema Penitenciario, tras un año de preparación, fue certificada para la detección de siete objetos y sustancias constitutivas de delito, con lo que se avanza en la profesionalización y fortalecimiento de las áreas operativas de todos los centros penitenciarios.

De acuerdo a un comunicado de prensa, así lo informó el coordinador del Sistema Penitenciario, Javier Ayala Rodríguez, quien resaltó que el trabajo que se realiza en la Dirección de Policía Procesal, es resultado de las acciones integrales de fortalecimiento institucional que marca la Secretaría de Gobierno que encabeza Carlos Herrera Tello.

La Unidad Canina obtuvo constancia de la Asociación para la Certificación de Perros de Servicio (ACEPES), en la detección y localización marihuana, cocaína, mentafetaminas, éxtasis, armas y celulares entre otros objetos constitutivos de delito en el interior de centros penitenciarios, con lo que se convierten en una valiosa herramienta para el respaldo de evidencias al momento de hacer puestas a disposición ante el ministerio público, explicó.

“Hace un año, la Unidad Canina operaba sin contar con un certificado que permitiera darle un valor probatorio en las puestas a disposición ante el ministerio público, ya sea del fuero común o federal, con esta nueva herramienta podremos comprobar y respaldar plenamente que los objetos ilícitos fueron identificados por un perro capacitado y certificado, lo cual es una evidencia mucho más contundente para impedir que se evada la justicia”, explicó.

Por ello, el coordinador destacó el trabajo que se realiza desde la Dirección de la Policía Procesal, para la capacitación, profesionalización y equipamiento de siete binomios caninos, mismos que cuentan con el respaldo de un médico veterinario zootecnista dedicado exclusivamente al control de salud y nutrición de los perros que trabajan en esta área.

Finalmente, adelantó que se espera que en los próximos meses, se logre colocar a dos binomios caninos debidamente certificados en cada uno de los 11 centros penitenciarios de la entidad para apoyar las labores operativas del personal penitenciario.