Durante el fin de semana largo, los tres segmentos de Acapulco registraron una ocupación hotelera general del 40 por ciento, con una afluencia de 71 mil visitantes y una derrama económica superior a los 186 millones de pesos.

Fue un simulacro del comportamiento turístico esperado para la temporada decembrina y de fin de año.

El titular de turismo estatal, José Luis Basilio Talavera, dijo que este puente largo “es una oxigenación económica para Acapulco, ya que restaurantes, hoteles, embarcaciones, yates de recreo y la mayor parte de los habitantes vivimos del turismo».

«La gente que vende artesanías y que se encarga de atender a los turistas, tuvieron una oportunidad de llevar sustento a su casa”, dijo el funcionario municipal.

En seguida advirtió que si se cuenta con el apoyo de la ciudadanía y no se relajan las medidas sanitarias, la temporada de diciembre en Acapulco podría garantizar afluencia de visitantes, mayor libertad de movilidad y una mayor derrama económica en beneficio de los habitantes.

A pesar del alto índice de covid-19, reportado por las autoridades sanitarias en la entidad, decenas de miles de turistas abarrotaron las más de 26 playas del puerto, así como las lagunas de Barra Vieja y Pie de la Cuesta.

Los operativos dispuestos por las autoridades municipal y estatal, los visitantes no respetaron el uso obligatorio de cubrebocas en su llegada a hoteles, bares y playas. En tanto hoteleros, restauranteros y bares tampoco exigieron a sus clientes que se colocaran gel antibacterial, el cubrebocas o respetaran la sana distancia.

En un recorrido por las principales playas del puerto se pudo confirmar que los visitantes y lugareños ingresaron con hieleras, bebidas alcohólicas y hasta alimentos, a pesar de que ello está prohibido en la nueva reglamentación por la emergencia sanitaria de covid-19 en todos los destinos de Guerrero.

Las playas se estuvieron abarrotadas por el fin de semana largo, que comprendió del 13 al 16 de noviembre, correspondiente al puente vacacional de la Revolución Mexicana

De los tres segmentos en Acapulco, la zona Dorada registró el primer lugar en ocupación, con un índice del 44.2 por ciento, seguida de la Diamante con 40 por ciento, mientras que Acapulco Tradicional o Náutica registró apenas 25 por ciento.