La decisión unánime de la Corte establece que en casos de feminicidio, el derecho a la reinserción del agresor no puede estar por encima de la justicia para las víctimas.

Ciudad de México, 15 de octubre de 2025. – En un fallo histórico que refuerza la lucha contra la impunidad en los crímenes de género, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) revocó la polémica reducción de condena que un Tribunal Colegiado había concedido a Diego Urik Mañón Melgoza, feminicida de la maestra Jessica González Villaseñor.

La decisión, tomada por unanimidad, no solo rectifica una injusticia en el caso concreto, sino que marca un precedente nacional obligatorio: la justicia para las víctimas de feminicidio debe prevalecer sobre cualquier argumento que minimice la gravedad del delito.

La Corte fue clara: el derecho a la reinserción social del feminicida no puede ser usado para reducir desproporcionadamente su condena. En delitos tan graves como el feminicidio, el interés de las víctimas y la proporcionalidad de la pena son lo primero.

El fallo se vio enriquecido por un «Amicus Curiae» (un documento de opinión experta) presentado por Carlos Torres Piña, fiscal general del Estado y Josué Mejía Pineda, presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos.

Este no es solo un triunfo para la familia de Jessica González. Es un mensaje para todo el sistema judicial mexicano ya que establece que no se puede ser condescendiente con quienes atentan contra la vida de las mujeres.

Con este fallo, la SCJN deja claro que en México no habrá tolerancia hacia la violencia feminicida ni hacia la impunidad que la perpetúa.