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“La providencia”, rincón moreliano que mantiene viva la tradición del ate artesanal

Foto y texto: Javier Guerrero/Contraluz

Ubicado a unos pasos de la Catedral de Morelia, sobre la calle García Obeso, se encuentra La Providencia, establecimiento dedicado a la venta de ates tradicionales desde hace más de cuarenta años.

Su propietario es Leonel Ramírez Calderón, quien aún conserva la técnica de elaborar estos dulces sin el uso de maquinarias ni otro artefacto mecánico que no sean sus manos.

Este oficio lo aprendió de su esposa, menciona, y poco a poco se interesó por el perfeccionamiento de los ates sobre «qué cosas hacer y qué cosas cambiar y así me fui poco a poquito».

La elaboración es la siguiente: se seleccionan las frutas que se encuentren en buen estado para, posteriormente, ponerlas a cocer y, de esta manera, quitar la cáscara y las semillas con el propósito de utilizar solamente la pulpa pues es apartir de esta que se producen los dulces.

Membrillo, higo, guayaba, nopal, mango, piña y perón forman parte de la variedad que pueden encontrarse en La Providencia, siendo el perón la base para la elaboración de los otros sabores y sus precios van desde 160 pesos el kilogramo hasta cinco pesos los higos endulzados puesto que también oferta palanquetas, calabaza y otros manjares para disfrutar.