Por: Gerardo Moreno

Era 1 de Diciembre de 2012, todo era algarabía en Palacio Nacional y la razón era que el nuevo presidente acababa de tomar posesión del cargo. Muchos de los presentes iban a rendir pleitesía y a congraciarse con el nuevo titular del poder ejecutivo pero además anhelaban pasar a la posteridad por lo que las fotografías estaban a la orden del día. La que se viralizó fue por quienes aparecen en ella: el recién estrenado presidente y 28 gobernadores en funciones, la mayoría de extracción priista.

Se presumía que un nuevo PRI gobernaba a México pasada la docena trágica. El resultado a la fecha, es que de los participantes de la fotografía varios se encuentran tras las rejas, otros tantos acusados de lo mismo que los encarcelados y hasta uno que otro prófugo. De ese tamaño la clase política que gobernó durante ese sexenio al país. Por lo sucedido a los que en ella aparecen y a ocho años de tomada la fotografía una pregunta flota en el aire: ¿quién sigue?

Una fotografía se realiza para tener momentos duraderos y en la nueva los que aparecen son los gobernadores que les ha dado por llamarse federalistas, sin embargo son los que tienen a sus estados más endeudados y con pésimas cifras en cuanto a la seguridad se refiere.

Las ideologías no importan, lo mismo da ser de izquierda o de derecha, y sus reuniones aunque las anuncian de interés por el país pareciera ser más que es el propio el que persiguen. La pregunta para que la nueva fotografía pase a la posteridad es ¿quiénes, cuando terminen el cargo, se verán en la misma situación de los que aparecen en la del 2012?