Laura Avalos/Morelia en línea

Durante la noche del jueves se realizó la detención de 23 normalistas luego de que la División Estatal de Caminos de la Policía Michoacán recibiera un reporte de robo de un autobús por parte de los estudiantes.

La unidad fue ubicada en la autopista de Occidente, a la altura de la caseta de Panindícuaro y luego de realizar la detención, los normalistas fueron trasladados a Morelia para ser puestos a disposición de la Fiscalía.

Ante el arresto, inició la congregación de estudiantes en la Normal Rural Vasco de Quiroga ubicada en la tenencia de Tiripetío, lugar al que también se desplazaron los elementos de la Unidad del Restablecimiento del Orden Público (UROP).

El objetivo de los normalistas era viajar hacia la capital michoacana para manifestarse en contra de la detención de sus similares, sin embargo, la UROP ya tenía establecido un cerco para evitar el viaje hacia Morelia.

Los residentes de la normal optaron por regresar a las instalaciones y durante el trayecto, un autobús en los que suelen trasladarse los elementos de la UROP, arrolló a por lo menos dos estudiantes que se encontraban sobre la carretera en compañía de cerca de un centenar de iguales.

En redes sociales también se manejaba la versión de que el chófer de la unidad se encontraba forcejeando con dos normalistas dentro de ésta, situación que provocó el atropello.

Fue entonces cuando inició el enfrentamiento donde palos, cohetones y piedras, se tornaron en las armas de defensa contra aquellos escudos y gases lacrimógeno de los elementos estatales.

Durante la batalla campal, algunos se dedicaron a apoyar a los heridos e ingresarlos a la escuela para resguardarlos, otros más a defenderse y algunos otros a tomar de rehén a uno de los agentes.

Sobre los estudiantes heridos, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) inició una investigación de oficio por los hechos en que resultaron atropellados los estudiantes normalistas, la cual se encuentra nombrada MOR/696/2020, con la que se determinará la acción u omisión de los funcionarios públicos partícipes de este suceso.

Sobre los elementos heridos, el secretario de gobierno, Carlos Herrera Tello, mencionó que según los informes fueron ocho los policías lesionados, quienes ya recibieron atención médica, asegurando que ninguna acción quedará impune.

El último en aparecer, fue el secretario de Seguridad Pública Estatal, Israel Patrón Reyes, quién justificó el actuar de los elementos ya que según su voz recurrir al caos y a la violencia, además de atentar contra la tranquilidad de los michoacanos no es correcto, ya que nadie está en contra de la ley.

«Los elementos fueron agredidos hay once compañeros heridos, y sobre la maniobra quiero precisar que fue realizada por el chófer al forcejear con dos normalistas, causando el descontrol del vehículo, no fue un ataque directo de la policía Michoacán», concluyó.