Fotos y texto: Juan Carlos Arreygue/Contraluz

Adrián Ávila, conocido en la escena electrónica como New Balance, es un dj y productor originario de San José California, pero su lugar de residencia se encuentra en Morelia.

A sus 15 años se adentró en el mundo de la música electrónica gracias a la influencia de su padre, quien tenía varios amigos inmersos en este medio. Poco a poco fue descubriendo que su gusto iba más allá de las tornamesas, lo que le llevó a crear su propia música.

Antes de sumergirse en la escena electrónica, Ávila encontraba su interés en géneros como el rock y el reggae. Sin embargo, a los 17 años comenzó a producir sus primeros sencillos de house y techno, mismos géneros que hoy en día sigue produciendo.

En los últimos dos años, la carrera de New Balance ha ido despegando con mayor fuerza, ya que se ha presentado en diversos escenarios, desde la Ciudad de México hasta Tijuana, pasando por Guadalajara, Querétaro y Morelos. También ha llevado su música al otro lado de la frontera, con presentaciones en San Diego y San Francisco.

Influido por las raíces ideológicas del techno y el house, New Balance abraza la diversidad como un principio fundamental en su carrera. Para él, la música electrónica es más que un conjunto de ritmos y sonidos; es una expresión de la aceptación de la diversidad en todas sus formas. En sus propias palabras, «es estar siempre en busca de una utopía, y esta música propone muchas veces esas visiones distintas que pueden llevar al humano a encontrar una mejor armonía entre toda la diversidad que hay entre los humanos».

En sus producciones, busca alejarse de lo tradicional, y la música electrónica es el utensilio perfecto para salirse de lo que se ha institucionalizado musicalmente hablando. Él ve las bases rítmicas del house y el techno, como un medio para explorar estados de consciencia distintos, y así alcanzar estados de trance para indagar en la profundidad de la mente.

En sus presentaciones, el objetivo de Ávila va más allá de simplemente entretener; busca crear un espacio de igualdad, donde todos son libres de bailar y expresarse como deseen. Su mensaje es claro: la resistencia, el bienestar interno y un recordatorio de lo que se creó en la pista de baile. Busca generar un sentimiento de libertad y empatía hacia los demás, reconociéndose mutuamente en la pista de baile como uno solo, donde todas y todos se mueve al ritmo de las mismas frecuencias.

El compromiso de New Balance con la música, también lo podemos apreciar en la forma en que decide hacer su música, pues es amante de los vinilos. Para él, un vinilo tiene más durabilidad que un archivo digital, ya que es un almacén de información más confiable y suena mejor. Además, la interacción con el vinilo le parece más enérgica, tanto que la llega a comparar con tocar la guitarra o una batería.

Entre otras cualidades que le ve al vinilo, menciona que hay más dificultades para que pueda encontrarse de forma pirata en internet. Lo que obliga a quienes quieren adquirirlo, a comprarlo de forma física, beneficiando así la carrera del artista.

Por estás razones, sacó su más reciente EP en ese formato. Titulado «Space Jungle», y bajo el sello de UFO series, una disquera de Ensenada, Baja California. Este EP conformado por cuatro tracks, está inspirado en los sonidos de la selva y ritmos africanos, que buscan visibilizar la naturaleza de forma futurista; una utopía sin dañar la naturaleza.