A 15 años del diagnóstico, María Refugio es una sobreviviente del cáncer de mama
Ana Paula Gutiérrez/Morelia en línea
Morelia, Michoacán.- Una noche del mes de junio del año 2006, María Laura Refugio se encontraba observando televisión en su recámara, por coincidencia sintió con su mano una bolita en su pecho derecho y fue el momento en que su vida dio un giro de 180 grados.
De inmediato llamó para realizar una cita con un oncólogo, esto ante la preocupación que generó en su familia, al día siguiente tuvo que esperar a que terminara la agenda del doctor, con la esperanza de ser atendida.
En el momento de la cita médica, el oncólogo clavó una jeringa en su pecho y al no salir ningún líquido de la protuberancia, le dio la primera noticia que incurriría en su estado de salud y que la obligaría a mantenerse en tratamiento médico por más de cinco años, en dos días le retirarían el tumor mediante un proceso quirúrgico.
“En esa misma semana, el jueves a las seis de la tarde en cuanto sustrajo el tumor lo mandaron analizar, y en ocho días tenían el resultado, a los ocho días llamo para preguntar y me indicaron que tenía que ir personalmente porque no me podían dar los resultados por teléfono”, comentó en entrevista para este medio de comunicación.
Ahí, le informaron que el tumor que le retiraron era maligno y que en breve tenían que quitarle la mama de manera completa, procedimiento que se llevó a cabo dos días después.
“Cuando entre al quirófano entre nerviosa y recuerdo que cuando salí y desperté, estaba parte de mi familia en el cuarto, me altere porque no tenía mi pecho y llamaron a una enfermera porque tenía una crisis me sedaron hasta el domingo como a las 7 de la mañana”, recordó.
El Cáncer encapsulado en etapa dos que se le detectó, fue la causa por la que tuvo que recibir seis quimioterapias cada veinte días, en la totalidad de ellas recibió una inyección para apaciguar los síntomas que provocaba el ingreso de estos medicamentos a su cuerpo y así poder resistir el vómito,dolor de cabeza, mareos y náuseas.
Además, y aunque no se podía remediar con algún medicamento, la pérdida de peso y de cabello, así como cejas y pestañas.
Previo a esto y como recomendación de los médicos, tuvo que sustituir su largo cabello por un corte al ras para evitar el Fuerte dolor de cabeza que le provocaba el aún mantenerse con cabello, así como el shock que generaba el observar como día con día su pelo quedaba en su almohada.
“Era normal (sentirse triste) porque estaba perdiendo una parte de mi cuerpo, no porque sea estética, si no porque es una parte de mi cuerpo, luego de un tiempo de las quimios me empezó a crecer, durante cinco años estuve tomando tamoxifeno y en constantes chequeos y después de cinco años me dieron de alta”, platicó.
Gracias a la temprana detección, su doctor comentó que además como todo fue rápido, es la razón para que María Laura aún esté aquí.
“Me siento contenta que gracias a dios son quince años y no me resultó en otro órgano de mi cuerpo, porque me he dado cuenta de casos que a determinado tiempo les han detectado”, mencionó.
Ahora, Laura Refugio se encuentra en espera de que el ayuntamiento Moreliano le obsequie una prótesis mamaria, ya que “es un apoyo bueno, porque están caras y están muy bien que hagan esas campañas debido a que las prótesis tienen determinado tiempo de vida”, y la que tiene consigo está a su lado desde hace aproximadamente seis años.